miércoles, 22 de febrero de 2017

¿Qué pasó en febrero?

            Foto tomada de: eltiempo.com 


        En la tercera semana de febrero del 2017, se han evidenciado en Bogotá algunas novedades frente al tema de grupos urbanos, movimientos sociales y religión.
Con respecto al tema de religión, se puede decir que en Bogotá existe una gran variedad de creencias que han tomado fuerza con el paso del tiempo, pero aun así, siempre se evidencia una gran dominación por parte de la religión católica y cristiana. Se ha encontrado que en la ciudad algunas iglesias han crecido y, de igual forma, su comunidad. Por parte de una iglesia cristiana, y a través de su pagina web G12, se ha encontrado cómo se han extendido y cómo hoy en día celebran todos los años un evento llamado "seamos luz". Este se llevó a cabo entre el 23 y 28 de enero del 2017, se reunieron más de 20.000 personas y se contó con la asistencia de pastores internacionales.
Además, en el contexto colombiano de post-conflicto, y evidenciando la historia del país, atravesada por la violencia, algunas iglesias católicas bogotanas han estado pronunciándose a cerca de su papel en la guerra. En primer lugar, sacerdotes, laicos, teólogos y religiosos han pedido a la Conferencia Episcopal pedir perdón públicamente.  Este sería un acto simbólico en dónde estén presentes líderes de movimientos liberales y comunistas, debido a su participación en el conflicto, siendo cómplices de muchos crímenes y guardando silencio hacia muchas injusticias. Además, han pedido cerrar la Diócesis Castrense, para tomar así una distancia prudente de todas las entidades armadas y represivas y, asimismo, trabajar por eliminar el sesgo ideológico por parte de la Iglesia.
Por otro lado, en esta semana se conoció la respuesta de un abogado de la Arquidiócesis de Cali en la que este culpaba a los padres de cuatro niños que fueron abusados por un ex-sacerdote. Según el abogado, los padres habían sido negligentes al dejar a sus hijos con el eclesiástico. Esto causó un gran revuelo y, sobre todo, rechazo a lo largo y ancho del país. En Bogotá, Cristina Plazas, la directora del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar condenó la repuesta de la Iglesia e incluso aseguró: "Estos mensajes no pueden ser permisivos del delito más atroz, más cruel de la humanidad, que es la violencia sexual contra los niños". Además, manifestó que, desde las oficinas del ICBF también están muy preocupados con las denuncias que ha habido contra 91 profesores del Distrito que habrían abusado sexualmente de algunos de sus alumnos, Paralelamente, la oficina de Control Disciplinario de la Secretaría de Educación Distrital está llevando a cabo las investigaciones y procesos disciplinarios contra cada uno de los profesores denunciados. 


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Foto tomada de: Twitter. @revocaapenalosa 

En el campo de Movimientos sociales en Bogotá, se presentaron algunas denuncias de líderes defensores de los Derechos Humanos que han recibido panfletos, amenazas y ataques que ponen en riesgo su vida. En localidades como San Cristóbal y Usme, fueron incluso incendiadas bibliotecas en donde se reunían jóvenes quienes utilizaban sus libros como escape de las drogas y el delito, negando así la posibilidad de aprendizaje, educación y conocimiento a estos jóvenes de escasos recursos que en esta oportunidad también son víctimas de la opresión y la violencia.
Desde que inició el mandato del actual alcalde de Bogotá, Enrique Peñalosa, se han creado grandes polémicas al respecto del manejo que este ejerce de la ciudad. Por consecuencia de esto, se han creado movimientos sociales en su contra. Uno de los más reconocidos se llama "Revoquemos a Peñaloza". Este último, que, como lo dijimos, no es el único que tiene este fin, se ha dispuesto recoger firmas por todo Bogotá para revocar el mandato del actual alcalde.
Otro ejemplo de un movimiento social que ha sido creado recientemente y que ha ganado importancia en la capital es el de "Colombianas poderosas". Este busca darle más fuerza al papel que juegan a diario las mujeres en el país.
En el municipio de Soacha, se inició un movimiento social por parte de padres de alumnos por el desacuerdo que tenían con algunos colegios privados por estos dejar sin estudio a algunos de sus niños, debido a que estos no firmaron convenio por concesión. 
"Ver luego aprendo" es un movimiento bogotano enfocado en proveer ayuda a niños con alguna dificultad visual que afecte su habilidad de aprendizaje. Este es un movimiento que ya lleva más de seis meses desde su creación y se dedica a viajar y a enseñar, para así ir eliminando el problema de déficit de aprendizaje en los niños en diferentes condiciones de discapacidad, los cuales tienen procesos más lentos y complejos y que muchas veces no tienen los medios económicos para financiar su estudio.
Finalmente, con respecto a los grupos urbanos, Bogotá se ha convertido en una ciudad cada vez más enfocada en el uso de vehículos ecológicos y económicos, como la bicicleta, la patineta o los patines. Actualmente, con la ciclovía esto se ha promovido más y se han creado incluso grupos como "Bogotá patina", con los cuales ciudadanos se reúnen para compartir un buen rato por la ciudad unidos por un mismo gusto por este deporte.

ANÁLISIS

Sin duda alguna, los abusos sexuales de niños cometidos por eclesiásticos en Cali, condenados de manera tajante en Bogotá por el ICBF y en general por la población del país, podrían marcar un deterioro en el lazo que siempre ha sido muy fuerte entre población civil e Iglesia católica. Esto podría empezar a eliminar todos aquellos ideales que presentan a la Iglesia como una institución transparente, incorruptible y al servicio de la gente. De una u otra manera, hechos como los ocurridos en esta semana, dan cuenta de los niveles de corrupción e impunidad que se presentan no sólo en Bogotá, sino en toda Colombia. El desafío, ahora, es lograr que estos actos no queden en la impunidad, como ocurre con la mayoría de delitos en el país.
         Como análisis grupal y para concluir el tema religioso podemos decir que a pesar de que Bogotá es una ciudad muy diversa, muy grande y con bastantes extranjeros, las fuentes de información acerca de creencias y prácticas religiosas distintas a las tradicionalmente profesadas en Colombia como el cristianismo y el catolicismo, son muy reducidas, Habría que preguntarse un poco más detenidamente porque esto es así. Claro que la Iglesia católica parte con ventaja histórica frente a las otras, desde la llegada misma de los españoles. Pero el mundo es cada vez más multicultural y diverso. Esto podría empezar a cambiar en los próximos años. De hecho, este 2017 se celebran 500 años de la Reforma Protestante impulsada por el monje alemán Martín Lutero. Seguramente, esto hará que más adelante se encuentre más información sobre otras corrientes religiosas.
Por otra parte, en el contexto colombiano de post-conflicto, será muy importante que el Estado colombiano logre asegurar la protección de los líderes y movimientos sociales que hoy existen y cumplen una labor muy importante. De esta manera, se evitará que se repita en el país algo como lo que ocurrió con la Unión Patriótica en la década de los 90. La paz firmada con las Farc no será completa si se siguen asesinando y amenazando líderes sociales, o si se siguen intentando silenciar movimientos sociales en Bogotá y en general en todo el país. Una paz estable y duradera, como lo desea una gran parte de la población, debe pasar por el respeto de un derecho fundamental del ser humano: el derecho a la vida.
Frente a los incendios de bibliotecas en el sur de la capital, se puede afirmar que esto no puede ser visto como un ataque planeado al azar. El hecho de haber incendiado una biblioteca tiene un valor simbólico muy fuerte. Ya sabemos que las personas de bajos recursos reciban, en su gran mayoría, una educación de bajo nivel y que, además, no tienen un fácil acceso a actividades culturales. Y si entonces, se les restringen esos pocos accesos gratuitos hacia un enriquecimiento cultural, su situación será aún más complicada. Y sus posibilidades de conocer más acerca del mundo y, sobre todo, de dudar sobre el medio que los rodea, serán botadas a la basura. Estos no son más que acciones de grupos ilegales que pretender mantener el status quo.
Con respecto a los movimientos sociales como "Ver, luego aprendo" o "Colombianas poderosas", podemos ver cómo, a pesar de las grandes brechas sociales que se ven en Bogotá actualmente, y de las condiciones en las que muchas personas viven a diario, los ciudadanos se siguen interesando por el bienestar de la población infantil con respecto a su estudio. Esto lo demuestran las protestas por parte de padres frente a los problemas que se encuentran en los colegios estatales, o las nuevas iniciativas de ayuda a algunos problemas académicos que sufre la población joven de Colombia. Las mujeres también juegan un rol muy importante cuando se trata de movimientos sociales, considerando que para algunas mujeres en Colombia las oportunidades son más difíciles de conseguir que para los hombres, o que los tratos hacia estas muchas veces no son justos. A causa de esto, se dan movimientos para dar voz y voto a estas mujeres que están comprometidas con cambiar esta realidad.

Los movimientos sociales involucrados en la política siempre estarán presentes en la ciudad de Bogotá. Actualmente, se ha creado gran polémica por la desaprobación del nuevo alcalde Enrique Peñalosa. Sin embargo, creemos que esto hace parte de un sistema político democrático, en el que la gente tiene derecho a manifestar sus ideales políticos, así estos estén en acuerdo o desacuerdo con el gobierno actual.